May 29

¿Cómo ciencia y sociedad se comunican?

Comunicación pública de la ciencia

En la sociedad contemporánea, las/os científicas/os desempeñan un papel crucial como expertas/os encargadas/os de estudiar y comprender el mundo que nos rodea. Sin embargo, a medida que la ciencia avanza, la comprensión de su complejidad se vuelve más difícil. Por ello, la comunicación del conocimiento científico, desde su producción hasta su divulgación, es un desafío fundamental para las/os científicas/os y toda la sociedad. En este breve artículo, exploraremos la importancia del conocimiento científico y su comunicación, cómo esta influye en nuestra comprensión del mundo y cuáles son sus desafíos.

La ciencia puede definirse como un conjunto de conocimientos obtenidos mediante un método sistemático y riguroso de investigación. Su objetivo es comprender los fenómenos observados en el mundo natural, físico y social a través de teorías que describan, expliquen y predigan dichos fenómenos. Las/os científicas/os realizan investigaciones, formulan preguntas, argumentan, observan hechos y crean hipótesis para explicar y predecir.

El conocimiento científico se comunica y se acepta como verdadero dentro de las reglas y procesos del sistema científico. En este sentido, la verdad científica es una construcción social basada en teorías, métodos y disciplinas específicas. La ciencia busca acumular conocimiento y evalúa nuevas ideas en relación con las existentes. Por esta razón, la revisión por pares juega un papel fundamental en la validación y reconocimiento de esta forma de conocimiento. Tanto así, que la ciencia se caracteriza por su objetividad relativa, transparencia en los métodos y su naturaleza colectiva y consensual, lo que establece la confianza que la sociedad deposita en ella.

La divulgación científica es parte de la Comunicación Pública de la Ciencia y la Tecnología (CPCT), un complejo ecosistema de conexiones entre la ciencia y diversos actores sociales. No se limita a transmitir conocimientos, sino que también implica la creación social de sentido y la integración de la ciencia en nuestras visiones del mundo. La divulgación científica selecciona, organiza y redistribuye el discurso científico de manera accesible, reintegrando la ciencia en la cultura. De ahí que sea un elemento esencial para promover la comprensión y participación de la sociedad en la ciencia.

Así, la comunicación científica influye en cómo damos sentido a nuestras experiencias. Es decir, no se trata solo de transmitir información, sino también de crear sentido y comprensión en las personas y comunidades. El método científico, la base empírica de las conclusiones, las estrategias comunicativas y las dimensiones sociales y éticas son determinantes en la forma en que interpretamos la ciencia. Por ello, es importante reconocer que la comunicación científica no es neutral y ha estado vinculada a proyectos científicos, políticos, filosóficos, sociales y económicos, entre otros. Es por esto que la comunicación científica es vulnerable a malentendidos y abusos. Los modelos y conceptos utilizados en la comunicación científica pueden presentar una visión simplista de cómo se comunican la ciencia y la sociedad, generar expectativas poco realistas sobre los beneficios de la comunicación y aumentar la distancia entre la ciencia y las audiencias no científicas. 

En resumen, la comunicación científica desempeña un papel crucial en la construcción social del conocimiento científico y en la relación entre la ciencia y la sociedad. Para fomentar una comunicación efectiva, es necesario superar los desafíos que enfrenta la divulgación científica y reconocer la influencia de la comunicación científica en la forma en que las personas interpretamos la ciencia. La diversidad de términos empleados en el campo de la CPCT refleja la complejidad de esta área y la importancia de abordarla de manera integral y multidisciplinaria. Al fortalecer la comunicación científica, podemos construir un puente sólido entre la ciencia y la sociedad, promoviendo la comprensión y la participación activa en la búsqueda de conocimiento y comprensión del mundo que habitamos.

Comunicación pública de la ciencia

En la sociedad contemporánea, las/os científicas/os desempeñan un papel crucial como expertas/os encargadas/os de estudiar y comprender el mundo que nos rodea. Sin embargo, a medida que la ciencia avanza, la comprensión de su complejidad se vuelve más difícil. Por ello, la comunicación del conocimiento científico, desde su producción hasta su divulgación, es un desafío fundamental para las/os científicas/os y toda la sociedad. En este breve artículo, exploraremos la importancia del conocimiento científico y su comunicación, cómo esta influye en nuestra comprensión del mundo y cuáles son sus desafíos.

La ciencia puede definirse como un conjunto de conocimientos obtenidos mediante un método sistemático y riguroso de investigación. Su objetivo es comprender los fenómenos observados en el mundo natural, físico y social a través de teorías que describan, expliquen y predigan dichos fenómenos. Las/os científicas/os realizan investigaciones, formulan preguntas, argumentan, observan hechos y crean hipótesis para explicar y predecir.

El conocimiento científico se comunica y se acepta como verdadero dentro de las reglas y procesos del sistema científico. En este sentido, la verdad científica es una construcción social basada en teorías, métodos y disciplinas específicas. La ciencia busca acumular conocimiento y evalúa nuevas ideas en relación con las existentes. Por esta razón, la revisión por pares juega un papel fundamental en la validación y reconocimiento de esta forma de conocimiento. Tanto así, que la ciencia se caracteriza por su objetividad relativa, transparencia en los métodos y su naturaleza colectiva y consensual, lo que establece la confianza que la sociedad deposita en ella.

La divulgación científica es parte de la Comunicación Pública de la Ciencia y la Tecnología (CPCT), un complejo ecosistema de conexiones entre la ciencia y diversos actores sociales. No se limita a transmitir conocimientos, sino que también implica la creación social de sentido y la integración de la ciencia en nuestras visiones del mundo. La divulgación científica selecciona, organiza y redistribuye el discurso científico de manera accesible, reintegrando la ciencia en la cultura. De ahí que sea un elemento esencial para promover la comprensión y participación de la sociedad en la ciencia.

Así, la comunicación científica influye en cómo damos sentido a nuestras experiencias. Es decir, no se trata solo de transmitir información, sino también de crear sentido y comprensión en las personas y comunidades. El método científico, la base empírica de las conclusiones, las estrategias comunicativas y las dimensiones sociales y éticas son determinantes en la forma en que interpretamos la ciencia. Por ello, es importante reconocer que la comunicación científica no es neutral y ha estado vinculada a proyectos científicos, políticos, filosóficos, sociales y económicos, entre otros. Es por esto que la comunicación científica es vulnerable a malentendidos y abusos. Los modelos y conceptos utilizados en la comunicación científica pueden presentar una visión simplista de cómo se comunican la ciencia y la sociedad, generar expectativas poco realistas sobre los beneficios de la comunicación y aumentar la distancia entre la ciencia y las audiencias no científicas. 

En resumen, la comunicación científica desempeña un papel crucial en la construcción social del conocimiento científico y en la relación entre la ciencia y la sociedad. Para fomentar una comunicación efectiva, es necesario superar los desafíos que enfrenta la divulgación científica y reconocer la influencia de la comunicación científica en la forma en que las personas interpretamos la ciencia. La diversidad de términos empleados en el campo de la CPCT refleja la complejidad de esta área y la importancia de abordarla de manera integral y multidisciplinaria. Al fortalecer la comunicación científica, podemos construir un puente sólido entre la ciencia y la sociedad, promoviendo la comprensión y la participación activa en la búsqueda de conocimiento y comprensión del mundo que habitamos.